También actúa a la inversa, llevando el calor del interior de los recintos hacia el exterior, refrescándolos.
Es un sistema compuesto por un evaporador, un compresor, un condensador y una válvula de expansión.
El funcionamiento de una bomba de calor necesita la aportación de energía eléctrica aunque en una cantidad muy inferior, una cuarta parte, a la de un sistema de calefacción o refrigeración eléctrica tradicional.