Para limitar el incremento del calentamiento global, El IPCC indica la necesidad de limitar las emisiones de CO2. Tratándose del CO2 emitido por el trafico rodado, se ha apostado por sustituir los coches de gasolina o diésel por coches eléctricos.
La huella de carbono del vehículo
La huella de carbono de un producto es la cantidad total de emisiones de gases de efecto invernadero producida a lo largo de su ciclo de vida.
Componentes de un vehículo
A excepción de la batería y del motor, la fabricación de la mayoría de los componentes de un coche eléctrico es similar a la de uno de gasolina o diésel.
La batería
Se ha evaluado que la huella de carbono de la batería de un coche eléctrico hasta su puesta en el mercado duplica la de un coche de gasolina. El proceso de fabricación de una batería de ion litio de 100Kwh, genera entre 15 y 20 toneladas de CO2.
Para fabricar la batería de un coche eléctrico se necesitan nickel, grafito, tierras raras, manganeso, cobre, cobalto y litio. Extraer estos metales, algunos ya muy escasos en el planeta, implica una gran aportación de energía y el desarrollo de unos procesos de obtención muy contaminantes.
La demanda de metales supera las actuales producciones y la búsqueda de nuevos yacimientos es exponencial. La actividad minera ya no tiene limites geográficos y se extraen metales en todos los rincones del planeta como el ártico, los grandes desiertos, el fondo de los océanos. las selvas tropicales, etc. El litio, el elemento más empleado para fabricar las baterías, necesita además para su obtención cantidades enormes de agua y el uso de disolventes muy tóxicos. Al aumento de la huella de carbono, se añade la huella ambiental producida por la contaminación de los ecosistemas naturales.
Uso y mantenimiento del vehículo
Durante su uso, el coche eléctrico produce una huella de carbono menor a la del coche de combustión aunque puede variar segun la procedencia de la electricidad que se utiliza para cargar la batería:
- si la batería se carga directamente con la electricidad generada por las placas solares de la vivienda, la emision de CO2 será mínima.
- si la batería se carga desde la red eléctrica, parte de esta electricidad procede de la combustión de combustibles fósiles, lo cual incrementa la huella de carbono. Alrededor del 50 % de la producción de electricidad en España procede de energías renovables (2021) y el resto de energías fósiles.
El desgaste de la batería
Las baterías tienen una duración de vida limitada. A medida que aumenta el número de cargas la batería va perdiendo eficiencia, la cual depende de los tipos de carga: las cargas rápidas desgastan más rapido que las cargas lentas.
Se estima que la sustitución de la batería tienen que realizarse cada 150.000 km y ello tiene un alto coste tanto en dinero (unos 5.000 euros) como en emisiones de CO2 y residuos contaminantes.
Los puntos de carga
Hay que tener en cuenta la huella de carbono generada por los puntos de carga.
En una instalación particular, la huella será menor pero la creación de las infraestructuras necesarias para crear una red de puntos de carga a nivel nacional representa una huella de carbono importante a tener en cuenta.
Por otra parte, se estima que en el año 2030 no habrá cobre suficiente para atender la demanda de este metal que se utiliza en grandes cantidades en todos los sistema de generación de energía renovable.
Las fuentes energéticas
Mientras la fuente de energía que alimenta a las baterías proceda de energías fósiles, el CO2 que no va a emitir el coche se ha emitido anteriormente en la producción de la electricidad.
Para que esto no ocurra es necesario:
- que la electricidad proceda de fuentes alternativas aunque debemos recordar que tampoco las energías alternativas son neutras en carbono.
- que las centrales eléctricas que queman petróleo, gas o carbón tengan dispositivos de captura del CO2 en origen, una técnica cara y en fase de pruebas.
Coste del coche eléctrico
El coche eléctrico tiene un precio muy elevado y vemos que no es tan neutro en carbono.
Los gobiernos apuestan por esta tecnología pero se olvidan de favorecer los transportes públicos, los medios de transporte alternativos en ciudades y promocionar desplazamientos que no tengan un gran impacto en el medio ambiente.
- Muchos ciudadanos viven en las afueras de las grandes ciudades con ninguna opción para desplazarse en transporte público para ir al trabajo.
- Para viajes largos se debería promocionar el tren en lugar de cerrar líneas y estaciones.
- El coche eléctrico pequeño podría ser una solución para ciudades. Pero su precio resulta muy alto para la mayoría de los ciudadanos y son necesarias más opciones que favorezcan una movilidad no contaminante.
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